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Thu, Apr
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5 opiniones sobre un mismo tema:

Columnas
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Explicación no pedida… Pablo Salazar.*

*Chiapas en la ruta de la corrupción

/Daniel Flores Meneses*

Estamos en pleno inicio de la sucesión en varios estados y en la presidencia que ahora tiene, López Obrador, y es hora de que las cosas se digan tal cual se dieron en el mugroso camino de la política. Todos, todos, sabemos o lo intuimos, porque el dinero público que da la Federación da a los estados y municipios, que dan los impuestos, y otros rubros, en Chiapas no se veían en la obra pública ni de la capital menos de los municipios. Y era porque todo se lo robaban sin ton ni son. El gobernador Escandón Cadenas, a cada rato señala que Chiapas fue saqueado. Él lo dice porque lo sabe. Las obras públicas de su gobierno, están ahí y en casi todos los municipios del estado, y en la capital ni se diga. Además está pagando la deuda de dos gobiernos, el de Sabines, y el de Velasco Coello. Y tiene dinero para obras. Se llama honestidad. Pues resulta que ahora, el que fuera gobernador de Chiapas, Pablo Salazar Mendiguchía, en las redes sociales, soltó también un video en donde acusa directamente al gobierno de Juan Sabines Guerrero, de haber blanqueado la presidencia municipal de Tuxtla. Hace bien Pablo Salazar en señalar lo anterior, porque a él le achacaron haber endeudado las arcas con 800 millones de pesos. Y señala, el ex gobernador, que efectivamente hay una deuda de 800 millones pero es municipal. Su gobierno no dejó deuda y no contrajo deudas. Juan Sabines Guerrero que fue el sucesor del hombre de Soyaló, no solo dejó endeudado el municipio, sino que dejó una deuda estatal de 20 mil millones de pesos, en su inefable paso por el gobierno estatal, que ahora está pagando la administración de Rutilio Escandón Cadenas, que sin embargo el dinero le alcanza para realizar obras, pero eso es honestidad. Pablo, no se mete con el Güero Velasco, porque ya no estaba en la política. Por eso no habla de él, pero el pueblo sí habla de él y de su gran afición por el dinero. Algún día entrará en el escenario, cuando ya no ocupe puestos que le dan pasearse y mantener a sus colaboradores en primera fila de las curules. Chiapas, sostuvo al PVEM, en donde Velasco Coello, tras acuerdos con otros partidos y candidatos ha logrado mantenerse y meter a sus ayudantes, a las curules, y es parece ser, el dueño de ese partido. No hay que olvidar que fue Juan Sabines Guerrero, el que detuvo a Pablo Salazar y lo mandó a la cárcel, un acto de revancha indiscutible. Doña Vicki Rincón que fue alcaldesa de Tuxtla, ha dicho que dejó 20 millones de pesos en las arcas municipales a Juan Sabines Guerrero para pagos a los trabajadores, pero que de repente desaparecieron. Este escenario que está apareciendo, seguirá en las tardeadas periodísticas, sin duda.

*Por respeto a la memoria histórica (aclarando paradas)

/Lulú Ovilla*

En un video que ha empezado a circular, el ex gobernador de Chiapas, Pablo Salazar Mendiguchia y ante su inquietante regreso al escenario político, oportunamente aclara paradas, en dicha grabación dice tajantemente que, los 20 mil millones de pesos que le achacan es una deuda que dejo el ex gobernador de Chiapas, Juan Sabines Guerrero, los 800 millones de pesos que dejo su gobierno, es absolutamente falso, que pago toda su deuda pública existente, que correspondían a mil millones de pesos, señala que hay una confusión, la Secretaría de Hacienda no debió fusionar la cuenta pública estatal y la municipal, los 800 millones le corresponden a su sucesor, más la estatal por más de 20 mil millones, todos son culpables menos él y si alguien lo duda, dice tener pruebas en caso de ser necesario, sus aclaraciones están de más cuando todos conocemos quién fue Pablo Salazar, la verdad histórica le recordará siempre que su sexenio fue llamado “gobierno represor”, se dedicó a perseguir, encarcelar y asesinar a periodistas, luchadores sociales y defensores de Derechos Humanos, hacer una crítica en el sexenio pablista, significaba todo lo anterior, pesan muchas vidas en su conciencia, entre ellas las de varios periodistas o dueños de periódicos, 30 bebés que fallecieron en el hospital de Comitán, también están los habitantes de los 41 municipios siniestrados por el huracán Stan, no se construyeron todas las viviendas y solo fueron unas cuantas, que al día de hoy ya no tardan en derrumbarse, por respeto a la memoria histórica de los chiapanecos, ya no debería de regresar al escenario político, seis años fueron suficientes donde vivimos el terror de haber tenido un gobierno represor.

*Pablo Salazar resultó ser toda una “madre de la caridad”

/Leonel Durante López*

“El gobernador Escandón no ha contraído deuda y ha decidido no contraerla durante su mandato: felicidades gobernador y en hora buena chiapanecos”, manifiesta Pablo Salazar Mendiguchía, gobernador de Chiapas (2000-2006), a través de un video difundido por él en redes sociales. Pero a la vez, niega haber dejado una deuda al término de su gestión que asciende a 881.7 millones de pesos. Creo que el gobernador Rutilio Escandón Cadenas no necesita de “vejigas para nadar”, para que el oportunista Salazar pretenda ser más santo que la Madre de Calcuta. También este tiene su historia, antes de asumir su gobierno era un pobre diablo y voy a utilizar sus mismas palabras: llegó al gobierno con una mano atrás y otra por delante. Al terminar su gobierno como todo político que asciende con artimañas a la mafia del poder, terminan millonarios, prominentes hombres de negocios, cuentas bancarias, propiedades fuera y dentro del país. Hasta un viñedo en Chile se hizo. ¿Será que lo compró con el sudor de su frente? Ya viene la época electoral, seguramente Pablo ambiciona un cargo de elección popular; una diputación federal o una senaduría, no le caería mal, pues poder económico tiene, pero ambiciona más poder. De ahí que con un video pide a gritos lo volteen a ver. Solo no hay que olvidar que la peor época para Chiapas inició precisamente con Pablo Salazar, empeoró con Juan Sabines Guerrero y con Manuel Velasco Coello, nos fue como en feria, pues ahora y gracias a sus raterías Chiapas y los chiapanecos no nos podemos recuperar. Por qué hoy Pablo Salazar se da golpes de pecho, pues porque algo quiere, volver a vivir como parásito del erario público y este ya inició su campaña para ver qué partido le echa la mirada. Lo bueno de todo es que el gobierno de Rutilio Escandón “le ha tocado bailar con la más fea”, pues este ha reducido la deuda de Chiapas a 19 mil 851 mdp, pasando del número 12º al 8º lugar con menos deuda pública a nivel nacional.

*La culpas compartidas del pasado

/Paco Andrade*

El exgobernador Pablo Salazar Mendiguchía, salió al quite para aclarar paradas en cuanto a la deuda pública de anteriores administraciones, entre ellas la suya, cuando gobernador. Pero antes de la aclaración, nada tontito, celebró que el gobierno de Rutilio Escandón Cadenas esté pagando las trapacerías y rapacerías de dos gobiernos del peor pasado que ha tenido Chiapas, el de la era Sabines y la otra de Velasco Coello. Ambos, bien gracias se pasean muy orondos y libres por cualquier parte del país, con desfachatez y cinismo. Pablo fue directo y muy claro, la deuda pública que le achacan es por parte de ayuntamientos, y el ayuntamiento que más debe es del periodo de Juan Sabines Guerrero, que con 20 millones en las arcas en el inicio, lo dejó vacío, desde que inició se veía el tipo de gobernante que sería -y fue-. Como mandatario estatal ya ni recordar es bueno, tiraba dinero a manos llenas, dinero ajeno, no el suyo. Dinero del pueblo. Deja a un sucesor que salió peor que él, que no le preocupó en lo absoluto pagar la deuda pública de su benefactor, al contrario, se olvidó de ello y se dispuso a hacer lo propio, robar de manera artera y cínica. Las consecuencias ya las conocemos. Hoy ambos gozan de la protección del hombrecito Palacio Nacional, que en su momento se presume, fue salpicado de la corrupción rapaz que tanto criticó y abanderó durante veinte años y hoy lo tiene en las mañaneras. Pablo no es inocente. Con esa idea romántica de hacer política con personajes del pasado y sus herencias, dejó como su sucesor al hijo del ciclón del sureste, Juan Sabines Gutiérrez; y el heredero hizo lo mismo, dejó en su lugar al nieto de un doctor que dejó en entrever su humanismo al dejar selvas y bosques totalmente pelones. Salazar Mendiguchía podrá limpiar su nombre por lo de la deuda pública, pero no su conciencia por haber dejado una herencia que ha sido un lastre, una maldición para el pueblo y estado de Chiapas.

LA QUINTA OPINIÓN ES DE USTED.