Los gobernadores en Chiapas han trasladado sus caprichos a un deporte.
Pablo Salazar construyó un estadio de fútbol. Juan Sabines un autódromo.
Manuel Velasco contra viento y marea construyó el Lienzo Charro.
Sólo falta que Rutilio Escandón se aficione al beisbol y construya un estadio.
DOXA1708
Typography
- Font Size
- Default
- Reading Mode