JA Teline V - шаблон joomla Форекс
19
Fri, Apr
118 New Articles

La esperanza de Chiapas

Editorial
Typography

En Chiapas el alejamiento del gobierno con la ciudadanía resulta significativo, aquí se ejerció un estilo personal de gobernar sin rumbo, con altos niveles de corrupción y con un despilfarro extremo, en donde el único interés político consistió en controlar y favorecer el voto del hambre hacia donde se inclinen las preferencias del gobernador, en lugar de construir política y socialmente la gobernabilidad de Chiapas.

 

En el sexto año de gobierno, los datos y los resultados dan evidencia de cómo Manuel Velasco tiró a la cañería el capital político que obtuvo en las elecciones del 2012 y ahora, a meses de que termine su malogrado sexenio, gran parte del desprestigio que carga se trasladó hacia el partido de MORENA, con quien estableció la alianza política para la reelección de su gobierno. 

MORENA no sólo le dio cabida a un grupo de colaboradores de Manuel Velasco sino que les dejó la operación política de las elecciones y la facultad de nombrar candidatos. En el acuerdo AMLO-Velasco Coello, se negociaron para exmiembros del partido verde, 60 candidaturas entre presidencias municipales, diputaciones locales, diputaciones federales y las dos senadurías; la candidatura a la gubernatura con anterioridad se la habían cedido.

El despilfarro de recursos, característico del gobierno verde, ya está en MORENA. Por todo el Estado se están promocionando en espectaculares los candidatos a diputados  federales y senadores, con la imagen de AMLO. Finalmente, la presencia electoral de Eduardo Ramírez se debe más a los recursos económicos que maneja, que al trabajo político realizado con la gente y en las comunidades.

En Chiapas las elecciones se ganan con dinero. Esa es la gran enseñanza de Manuel Velasco a sus colaboradores, pues en las elecciones del 2012 se solía comentar la expresión del propio gobernador quien manifestaba que tenía 600 millones de pesos para ganar la gubernatura, 10 veces más de los recursos establecidos como tope máximo de campaña. Lo que significa que ese triunfo electoral estuvo marcado por las violaciones a la ley.

En diferentes ocasiones se ha señalado que el principal inversionista de la campaña de Manuel Velasco Coello fue Alfredo de León Villard, -se comenta 500 millones de pesos de aportación-, quien durante este gobierno se convirtió en el constructor favorito, sin que muchas de las obras que le fueron asignadas de manera directa se realizaran. El expresidente municipal de Tenejapa,  Antonio Santiz Gómez, tiene problemas con su pueblo y con el órgano de fiscalización por la comprobación de la cuenta pública, Él le asignó 80 millones de pesos a las empresas de los Villard y las obras no se realizaron. Misma situación tiene Leonardo Guirao, quien en su paso por la presidencia de Chilón le entregó 200 millones de pesos A Alfredo de León y las obras tampoco se realizaron.

En las elecciones del 2015, muchos candidatos del verde a las presidencias municipales pasaban a las oficinas de Alfredo de León Villard, para recibir sus bendiciones y asegurar el financiamiento de las campañas. En las elecciones del 2018 sucede lo mismo, pero ahora los candidatos favorecidos son de MORENA. Sobre todo porque la dirigencia del PES les fue cedida a los de León Villard, por Eduardo Ramírez, quien fue el promotor de ese partido en Chiapas, y el PES va en alianza con MORENA.

MORENA se promueve bajo el slogan de la esperanza de México y así muchos seguidores veían a este partido en Chiapas, como la esperanza. Lo verdaderamente lamentable es que el gobierno de Manuel Velasco ha sido tan desastroso, que hasta dejó a Chiapas sin esperanza, porque hoy MORENA es el mismo verde pero disfrazado.