El intervencionismo del gobernador en el resquebrajamiento de las candidaturas al gobierno del Estado llegó parcialmente a su fin. Anoche los representantes de los partidos confirmaron en el IEPC la candidatura común de cinco partidos encabezada por Roberto Albores Gleason como candidato.
El desgaste de este proceso electoral resulta innecesario y se percibe una candidatura forzada y en donde lo único que tienen en común es la conveniencia. En este desenlace Albores Gleason sale perdiendo, pues termina constituyendo una alianza con personeros que indudablemente son sus enemigos y quienes se van a comportar como verdaderos caballos de Troya. De allí que sea imposible hablar en este momento de unidad y de fortalecimiento.
Por el otro lado vemos a un gobernador que busca controlar el proceso electoral y que mantiene los mecanismo de dominación del voto del hambre, que es el que finalmente inclinará la balanza del ganador de la contienda.
Para Albores representaba un riesgo que los partidos del gobernador abandonaran la coalición pues eso significaba pérdida de votos, pero la permanencia de todos los partidos ahora bajo la figura de candidatura común, implica la subordinación relativa del candidato a los caprichos del gobernador y en ese sentido lo mejor era romper con el cordón umbilical, lo que le hubiera dado autonomía y la libertad para criticar las ocurrencias de este malogrado gobierno.
Manuel Velasco ya mostró sus cartas y ya dio muestras claras de su espíritu a la traición, lo que lo hace un personaje poco confiable. Dice que él va Con José Antonio Meade, pero sobre la base de los hechos hace alianzas con López Obrador. Autorizó que sus partidos se sumen a la candidatura de Albores Gleason pero en realidad sus afectos e intereses están con los candidatos de MORENA. En este sentido Roberto Albores nunca representó una opción política para el gobernador y éste no tiene ninguna razón para hacerlo ganar. De allí que esta candidatura común que registraron anoche los cinco partidos sea una candidatura de a mentis.
En estas cuatro semanas de campaña para la gubernatura, Albores Gleason ha sido humillado por Manuel Velasco y ha sido exhibido por su falta de carácter. Inclusive se filtró que la cancelación de los eventos programados en Palenque y Salto del Agua se debió a una orden del gobernador, que puso en ridículo a quien dice que “No se asusta ni se raja”, pero que no le quedó de otra que cancelar los eventos en esos municipios, cuando todo estaba listo para recibir al candidato Albores Gleason.
La candidatura común favorable a Albores Gleason es contra natura, debido a que es producto de un acuerdo nacional de partidos en el que se establece el voto a favor de la candidatura presidencia de José Antonio Meade y a favor de Roberto Albores. Pero la suma de Mover a Chiapas y Chiapas Unido descompone el acuerdo en virtud de que Enoc Hernández, empleado del gobernador Velasco Coello y gerente del partido Mover a Chiapas ya manifestó públicamente que él va a votar por Andrés Manuel López Obrador, candidato de MORENA, lo que confirma que Albores Gleason va a andar en campaña rodeado por enemigos del proyecto político que él representa.