Lo razonable es que después de las elecciones todo retornara a la normalidad y en los casos en que haya inconformidad en los resultados, ésta se dirimiera en los tribunales como establece la ley. Sin embargo en Chiapas la violencia se ha constituido como el significado de normalidad, y aunque los asesinatos sea una recurrencia en las comunidades, la autoridad termina concluyendo de que no pasa nada.
Tres días después de las elecciones, la violencia ha surgido en Venustiano Carranza, Tila, Chilón, Jitotol, La Concordia, Ocozocuatla y Tapiula y los enfrentamientos están latentes en Ixtapa, Chiapa de Corzo y Frontera Comalapa.
Lo paradójico de muchos de estos enfrentamientos, es que se están generando entre partidos que se encuentran bajo el control total del gobernador, llámese Partido Verde, Chiapas Unido o Mover a Chiapas.
En las elecciones del pasado 1 de julio existió una intervención desmedida del gobernador del Estado, lo que está originando que se constituya un fraude institucional.
De entrada hay que señalar que el discurso del 6 de 6 que se manejó en MORENA no funcionó. El comportamiento general de las elecciones así lo indican. De acuerdo a los datos de los organismos electorales La coalición MORENA-PES-PT obtuvo en las votaciones presidenciales un millón 96 mil 249 votos; para la gubernatura de Chiapas, esta misma coalición obtuvo 697 mil 72 votos y para las presidencias municipales obtuvo 466 mil 778 votos. Las cifras por sí solas evidencian un comportamiento desigual del electorado que echa a la borda el 6 de 6.
Pero de acuerdo con la misma información de los organismos electorales, se puede identificar el intervencionismo de Manuel Velasco en las elecciones. Sobre todo porque gran parte de la diferencia de votos entre Andrés Manuel López Obrador con Rutilio Escandón fue aportadas por el Partido Verde, Mover a Chiapas y Chiapas Unido, que entre los tres partidos le aportaron a AMLO un poco más de 300 mil votos.
Sin embargo, la inconsistencia del comportamiento electoral se percibe en las elecciones a presidentes municipales, debido a que no hay correspondencia entre los resultados de la suma de los tres partidos del gobernador con los resultados que obtuvo Fernando Castellanos a la gubernatura, quien fue el candidato de estos tres partidos.
Al respecto, en las elecciones a los ayuntamientos, el Partido Verde lleva 354 mil 621 votos; Mover a Chiapas lleva 146 mil 162 votos y Chiapas Unido lleva hasta este momento 121 mil 109 votos. La suma de los tres partidos alcanza 621 mil 892 votos, cantidad suficiente para hacer muy competitiva la candidatura de Fernando Castellanos y cerrar las elecciones con Rutilio Escandón quien obtuvo 697 mil 72 votos como ya se mencionó con anterioridad. Sin embargo, de acuerdo con las cifras del IEPC, Fernando Castellanos Cal y Mayor sólo obtuvo 382 mil 622 votos, cantidad muy debajo de los votos que alcanzaron los partidos que lo proponían, en las elecciones municipales.
Las cifras electorales en Chiapas y el comportamiento de los electorados es controversial. Las elecciones fueron manipuladas al capricho de Manuel Velasco Coello y el análisis superficial de las cifras reportadas hasta hoy por el IEPC y el INE así lo demuestran. Lo que obliga a realizar un análisis más a fondo, sobre la intromisión del gobernador del Estado en el resultado de las elecciones.