La funcionalidad de la Casa de Gobierno

El gobernador Rutilio Escandón, en su afán de replicar en Chiapas las decisiones de López Obrador en el gobierno federal, decidió no habitar la Casa de Gobierno, omitiendo con ello la funcionalidad de ese espacio para atender los asuntos de públicos, en el que el gobernador podía desarrollar varias reuniones de manera simultánea sin importar el horario de trabajo.

La funcionalidad de la Casa de Gobierno no se puede reemplazar con el palacio de gobierno, pues ahí prácticamente es imposible tener reuniones de trabajo y atender una agenda, porque no existen despachos para ello, porque su funcionalidad está determinada por un horario que no es nocturno, pero fundamentalmente porque el palacio de gobierno sufre cotidianamente el asalto de las organizaciones.

Rutilio Escandón al clausurar la Casa de Gobierno, no percibió que la función pública que encarna su figura invade la intimidad de su vida privada, pues está obligado a atender en su casa asuntos públicos que requieren su atención; sobre todo porque él es gobernador de Chiapas las 24 horas del día y no puede sustraerse al cumplimiento de sus responsabilidades.

Esta situación se vivió ayer domingo, en el que poco más de medio centenar de jóvenes acudieron a su casa en el Fraccionamiento Tucanes, de esta ciudad, a exigir que los atendiera, ocasionando molestias a los vecinos que habitan el fraccionamiento.

Este acto no puede considerarse como una invasión a la vida privada, en virtud en que fue el propio gobernador el que decidió construir un espacio público privado en su casa, aunque él nunca se haya dado cuenta de lo que podía suceder con la decisión poco eficaz que tomó.

Eran usuales las audiencias en la Casa de Gobierno a altas horas de la noche, así como la presencia de varios funcionarios atendiendo la agenda del gobernador, o bien los secretarios acudían de urgencia para informar sobre cualquier contingencia que suele presentarse.  Eso no se puede realizar en el palacio de gobierno, lo que  implica que el gobernador empezará a tener reuniones de trabajo en su casa.

A partir de este momento, van a ser recurrentes los mítines y exigencias de atención en la casa privada del gobernador, y más si continúan las desatenciones y la ineficiencia en la solución de las demandas y necesidades de la población, de parte de un gobierno, que hasta ahorita ha mostrado que carece de gabinete.

Después de la experiencia de ayer, en el que los jóvenes se resistieron a abandonar el Fraccionamiento Tucanes, aún y cuando el diputado Emilio Salazar se esforzó en llevarlos a otro lugar,  Rutilio Escandón debe de reconsiderar su decisión y ocupar la Casa de Gobierno. Sus vecinos así se lo van a demandar, y él deja de correr el riesgo de traslapar la función pública con sus espacios privados.