Ventaneando al gobernador Rutilio Escandón

La falta de operación política en la visita del presidente de la república a Tapachula, del pasado jueves 20 de junio, donde los maestros hicieron patente su inconformidad, le ocasionó al gobernador Rutilio Escandón una fuerte reprimenda y un desaire de parte de López Obrador.

Resulta que como parte de la gira en Chiapas, Andrés Manuel López Obrador tenía programada en la agenda una visita a la ciudad de San Cristóbal de Las Casas, para el viernes 21 de junio, evento en el que se entregaría equipo médico al hospital de las culturas, que finalmente fue cancelado porque las condiciones sociales en la entidad no garantizaron la seguridad del presidente y cuyo acto de entrega se realizó el domingo, presidido por el gobernador, sin la presencia del presidente.

En la visita a Tapachula el presidente pudo constatar la ausencia de legitimidad que tiene Rutilio Escandón, quien mostró la inoperancia política al no poder organizar satisfactoriamente un evento dentro de un territorio gobernado por MORENA, en el que López Obrador, por primera ocasión en su gobierno, fue recibido con abucheos y reclamos.

La situación no sólo fue bochornosa por la falta de control político sino que colocó en una condición difícil al gobernador, que utiliza siempre en su discurso la referencia y el halago hacia el presidente, que hizo patente su gesto de malestar y condujo a la cancelación de su visita a San Cristóbal.

En el análisis del recuento de daños, Rutilio Escandón acepta que se contrate la transmisión de un programa de televisión, en donde se difunda el Chiapas imaginario del gobernador, en donde todo está en paz y en el que se respira tranquilidad, sin importar de que el presidente haya conocido una parte del Chiapas real, en donde hay molestia y en donde no se puede garantizar el tránsito vehicular en las carreteras ni al presidente de la república.

La contratación del programa “Ventaneando” es una burda maniobra publicitaria, con un alto costo al erario chiapaneco, en el que se busca vender la imagen de un gobernante que en seis meses de la administración ya demostró que es más de lo mismo y que mucho daño le ha hecho a Chiapas.

Contratar a Paty Chapoy, a Daniel Bisogno y Pedro Sola, para difundir las maravillas de Chiapas resulta insultante y muestra con claridad el nivel intelectual del gobernante, que privilegia un programa de chismes e intrigas para restañar su cada vez más deteriorada imagen pública.

En la transmisión del programa en Chiapa de Corzo el día de ayer, fue entrevistada la Comisaria de seguridad pública, que cumpliendo las instrucciones describe el Chiapas imaginario del gobernador, en el que asegura: “Ser uno de los estados más seguros del país no es casualidad, es fruto del trabajo del gobernador Rutilio Escandón”.

En la entrevista, la funcionaria chiapaneca demuestra que sabe mentir y que se identifica con el Chiapas imaginario del mundo feliz de Ruty. “¿Es Chiapas un destino turístico seguro?”, preguntó la conductora de Ventaneando. La titular de la SSyPC la miró, sonrió amablemente y respondió: “Por supuesto Paty, no solo es un destino turístico seguro, sino que es un lugar seguro para vivir. Todos los días nos estamos esforzando, trabajando bajo el liderazgo del gobernador Rutilio Escandón Cadenas, trazando los planes, programas y acciones de seguridad, con el fin de brindar paz y tranquilidad a los habitantes de Chiapas y también a los visitantes”.

El evento de Tapachula debió de servir para reconocer que las cosas no están bien como las imagina el gobernante, pero queda claro que esa experiencia no sirvió y contrató a un programa de lo más desprestigiado de la televisión para vender las mentiras de un Chiapas irreal, de un gobierno sin gobierno.