Apología del desorden

Editorial
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Hay muchos Chiapas, pero el más irreal es el que miran los funcionarios públicos, principalmente el gobernador del Estado y el secretario de gobierno.

 

En un momento de repunte de la protesta y la movilización, estos dos funcionarios ven un Chiapas tranquilo, con gobernabilidad y deseoso de salir adelante y si les preguntan qué sucede con los problemas de Chiapas, contestan que se está trabajando para atender todas las demandas de la población y que ellos le apuestan a la legalidad y al diálogo.

Seguramente el gobernador y el secretario de gobierno están convencidos de que todo va muy bien. No importa si en algunos municipios la población llega y secuestra a funcionarios, como en El Bosque, Mezcalapa o Las Margaritas. O quizá les parezca civilizado el intercambio de funcionarios retenidos por presos recluidos en El Amate.

Sobre Chalchihuitán y Chenaló no hay de qué preocuparse. El problema de los límites entre ambos municipios data de más de cien años y no ha sucedido nada. La vida comunitaria se reproduce y la población ya aprendió a convivir con ese problema, pero el compromiso de este gobierno es dejarlo resuelto, porque no se vale que se hereden los problemas.

Para funcionarios como ellos, el riesgo mayor son los periodistas. Ellos son los que agrandan los problemas y dramatizan en exceso, solo con el fin de llamar la atención…

Seguramente están convencidos de que en Chilón, Tila y Yajalón las cosas van muy bien, en esa zona hay un trabajo extraordinario del Partido Verde, que sin problema alguno el secretario de gobierno puede desentenderse de esa zona, pues ahí todo está bajo control.

En la Región Costa lo que hay son incidentes menores, nadie se debe de preocupar, de que en los últimos días hayan aparecido varios muertos y algunos de ellos, con tiro de gracia. Lo mismo sucede en el municipio de Berriozábal, en donde también han habido incidentes entre pandillas, pero siempre hay personas que especulan y que quieren ver cosas de más en donde no hay nada.  

En los lugares en donde hay condiciones propicias para la minería todo está bien. La población está de acuerdo con esas empresas, pero siempre hay inconformes que están en contra de todo y a favor de nada, pero las empresas no tienen de qué preocuparse, porque el gobierno de Manuel Velasco garantiza la inversión en la entidad…

El gobernador ya dio instrucciones para que el sector salud funcione adecuadamente.   Antes de que concluya el año se liquidarán a los acreedores y los hospitales ya están en condiciones para atender con eficacia y calidez a la población.

Si hay un Chiapas en donde las cosas no funcionan adecuadamente es el que se imaginan todos aquellos que solo critican y que quisieran que a Chiapas le fuera mal. Afortunadamente el gobierno de Manuel Velasco cuenta con un gran respaldo popular, se siente en las giras que realiza y el presidente Peña Nieto lo distingue con su amistad y ahora hasta compadres se hicieron.

Para las autoridades que hay en Chiapas este gobierno es de resultados y cercano a la gente y no percibe el desastre social que hay en la entidad.