Dos Bocas operaría hasta 2023 “si las condiciones lo permiten”: Pemex

Petróleos Mexicanos (Pemex) anunció que el requerimiento de inversión presupuestal asciende a 353 mil millones de pesos, lo cual representa un incremento del 15.6% respecto al presupuesto del 2020.

Al presentar su Plan de Negocios 2021-2025, la petrolera encabezada por Octavio Romero Oropeza señaló que el cambio en la expectativa de los precios del petróleo para mediano plazo, derivado de los efectos globales de la situación geopolítica y sanitaria, originó un replanteamiento de la cartera de proyectos de Pemex.

“Ante las condiciones de mercado que se anticipa y bajos criterios de rentabilidad, la optimización del portafolio de inversiones en exploración y producción de hidrocarburos, requiere de inversiones del orden de los 300 mil millones de pesos en promedio para el horizonte 2021-2026 con el propósito de apoyar la actividad física y las metas de producción”.

Pemex señaló que, para la refinería de Dos Bocas, durante el 2021 el gobierno de Andrés Manuel López Obrador tendrá que desembolsar 45 mil millones de pesos y si “las condiciones lo permiten” se canalizarían otros 116 mil millones para el 2022 con el objeto de concluir la construcción e iniciar operaciones en el 2023.

En el Plan de Negocios, Pemex, previó que será hasta el 2024 cuando ya comience a registrar cifras positivas y deje a un lado las pérdidas. De hecho, para el 2022, estima reportar un balance financiero negativo de 143 mil millones de pesos y en el 2023, 38 mil millones de pérdidas, afectada por los efectos de la pandemia y los precios internacionales del petróleo

Asimismo, la petrolera espera reducir el saldo de su deuda financiera este año a unos 105 mil millones de dólares y mantenerlo en esos niveles los próximos años.

Dichos pasivos cerraron en el 2020 en unos 113 mil 200 millones de dólares y el gobierno anunció hace poco que desde este año asumirá las amortizaciones de deuda, que solo en 2021 rondan los seis mil 400 millones de dólares.

Pemex expresó en el documento que, si los fundamentos macroeconómicos permiten mejorar los resultados financieros, “una de las prioridades será la canalización de compromisos de deuda sin estar necesariamente aparejados por nuevas colocaciones”.